Las fotos de Rosh ha-Shaná 5772 que ves a continuación son las últimas sacadas por mi cámara digital que compré en la ciudada de Nueva LLorque cuando fuimos para el beit din de José Manuel. A las 13’18 el jueves 6 de octubre en una zona frequentado por turistas y un ejercito de manguis, el movil sonó. Bajé de la bici, la apoyó contra la pierna, desaté el bolso de la cesta de atrás, hurgué en el bolso como un pequeñito animalito del bosque que pretendía desenterrar una raíz apetitosa, pero no llegué a contestar. En el momento que tardé en averguar quien me había llamado, un mangui afanó el bolso. ¡Qué rabia! Gracias a Dios, recuperé el D.N.I. ¡Qué alivio! Pero perdí para siempre el kit de diabetes, 20€ y la cámara.
Sin embargo, la vida sigue. Rosh ha-Shaná fue genial y Yom Kipur fue estupendo por las aportaciónes de una panda de amigos y miembros de La Javurá que trabajan juntos y con muy buena voluntad para que tanto como las fiestas como la vida cotidiana sea una alegría.
Pedro, el mejor taxista de Valencia (móvil 651941981), me recogió (ida y vuelta) con todos los bartulos para montar Rosh ha-Shana y, 10 días después, volvió a repetir el favor para Yom Kipur (ida y vuelta ambas veces). Robert y otros nos encontraron en la puerta del Hotel Astoria-Palace, y lo montaron todo. Todos, y mi querido Rubén quien nunca olvida traer los jalot redondos todos los años sin falta, trajeron manjares y rosas para compartir y alegrar el acontecimiento.